El uso de cinturones o arneses para sujetar o contener a los ancianos, ingresados en residencias, que sufren agitación ha enfrentado a los médicos con los técnicos de la Conselleria de Benestar Social.
De forma unilateral, y sin contar con los médicos geriatras que atienden las residencias de ancianos, donde cerca del 50% de los acogidos sufre algún grado de demencia, Bienestar Social ha emprendido una iniciativa dirigida a dichos centros en la que insta a reducir o eliminar las sujeciones, que se aplican a los residentes en riesgo de autolesión o accidente.
Del mensaje de la conselleria que dirige Josep Lluís Cleries, se desprende una cierta criminalización de esos recursos, que siempre son prescritos por el médico del anciano y son autorizadas trimestralmente por su familia. Un reciente debate celebrado en el Col·legi de Metges de Barcelona (CMB), en el que participaron médicos geriatras, forenses y jueces, ratificó la conveniencia de utilizar el recurso como medio de protección del anciano y de sus compañeros. El choque de criterios entre ambas instituciones es evidente y notable.
Los médicos que atienden las residencias geriátricas de Catalunya son partidarios de sujetar a algunos ancianos con recursos físicos o farmacológicos cuando sufren crisis de agitación, angustia o descontrol de sus acciones a causa de una demencia, para evitar, explican, que la crisis lleve a su propia lesión o a la agresión de otra persona.
Durante la noche
En algunos casos, esas sujeciones pueden aplicarse todas las noches o durante algunas horas cada día. Una contención consiste en situar un cinturón de seguridad – que no impide moverse pero sí desplazarse- en el sillón en que permanece el anciano, o en la cama, con el fin de que tenga dificultad para levantarse de ambos lugares cuando está solo. También existen contenciones físicas en forma de arnés situado en la cama. Cuando el anciano debe llevar sonda urinaria y su tendencia involuntaria lo lleva a arrancársela, los médicos también recomiendan sujetarles las muñecas en las horas nocturnas.
La conveniencia de aplicar todas estas medidas, indicaron los participantes en el encuentro del CMB, se pone en evidencia cuando hay que atender a un a persona afectada por alguna demencia, especialmente si es la de alzheimer en fase avanzada. «Los pacientes afectados por demencias sufren alteraciones cognitivas y trastornos de la conducta que les provocan gran agitación, ansiedad y movimientos incontrolados, y en esos casos, el uso de contenciones físicas de día o de noche forma parte de su tratamiento, al igual que lo son los fármacos narcolépticos que intentan inducirles relajación», indicó el doctor Miquel Colomer Giner, vocal de residencias en la Societat Catalana de Geriatría. La posición de los médicos geriatras, así como la de forenses y jueces, difiere de forma sustancial de la opinión expresada por los expertos de Benestar Social, que se han mostrado partidarios de «tender a la supresión de las contenciones» físicas. «Los forenses -médicos que hacen la autopsia de quienes fallecen de forma inexplicable- aseguran que el uso de contenciones físicas no es causa de muerte de los ancianos, a diferencia de lo que ocurre cuando sufren caídas a consecuencia de su movilidad incontrolada», añadió Colomer. La rotura del fémur puede ser causa de muerte en un anciano, indicó.
No obstante, la iniciativa de Benestar Social sigue su curso. Calculan que en los primeros seis meses de vigencia el número de ancianos con contenciones físicas se ha reducido casi un 20%. Las residencias tienen instrucciones de intentar convencer a las familias para que no autoricen la inmovilización de sus ancianos. «A los familiares les explicamos que las contenciones no hacen más felices a los abuelos y les animamos a pensar si ellos querrían ver reducida así su movilidad», explica Cinta Pascual, presidenta de la Associació Catalana de Recursos Assistencials, patronal de los geriátricos.
La familia firma
La aplicación de contenciones físicas en residencias geriátricas de Catalunya se realiza de común acuerdo entre la familia del anciano y el médico titular del centro. Ambos suscriben un documento de consentimiento informado en el que se razonan los motivos que aconsejan la sujeción forzosa. «El uso de sujeciones no depende de la cantidad de personal de la residencia, sino que ha de obedecer a criterios médicos», dijo Colomer. «Un anciano con agitación pone en peligro su integridad físcia -dijo el geriatra–.
Esto lo sabe muy bien cualquier sanitario que trabaje en una residencia geriátrica».
rafae belda dice
Las ataduras para gente Mayor y que no caminen y estén en silla de ruedas ,es lo ideal , pues evitan caídas y a esas edades son mortales, y en la cama lo mismo ,se evitan caídas ,y es por su bien , lo aconsejo al 100 por 100, mi madre la vi un dia en tierra y sin poder levantarse y estuvo 2 horas, hasta que llegue ,y le puse un cinturón por su Bien ,gracias por leerlo.
aavellanalcalzadilla dice
Rafael en los casos en los que el enfermo, en este caso tu madre si esta sola, son razonables el uso siempre que no le generen la ansiedad que supone verse inmovilizado. Pero en los casos en los que no están prescritas por el medico,; tiempo, horario y motivo, autorizados por la familia en instituciones se deben en la mayoría de los casos por mala praxia y comodidad o falta de personal y formación e información sobre como poder sustituir estas sujeciones por otros métodos no farmacológicos en los que el paciente esta tranquilo y sin necesidad de sujeciones físicas, como el caso que describes. Un saludo y gracias por tu comentario en nombre de todo el equipo de Alzheimer Universal.
Victor dice
Di que sí, si al anciano con demencia o Alzheimer le genera ansiedad sentirse inmovilizado, dejémoslo suelto, que haga lo que quiera, que se tire de la cama alegremente y se rompa algo. Eso contribuirá enormemente a su felicidad, que es lo que todos buscamos.
Jesús Tj dice
Hola Victor. En los años en los que cuidé a mi Madre con demencia tipo Alzheimer, uno de los días en los que no tenía a nadie en casa para ayudarme, estando en la silla de ruedas, y siendo la hora de comer, le tuve que poner un cinturón ancho un poco más arriba de la cintura, con un cojín y nada apretado, simplemente para que su cuerpo se «sujetase» lo suficiente para ese tiempo en el que le daba la comida. Me sentí raro, pero en ese momento fue la única forma que encontré. Podía haberla llevado a la cama articulada? Pues sí, pero tampoco podía estar las 24 horas ahí y mientras hacía las cosas de casa la llevaba conmigo a la habitación que fuera. En fin, sujeciones hay de muchos tipos como sabes, mecánicas, (más o menos severas) y farmacológicas. Las dos son algo preocupantes y a veces creo que es necesario, pero en el caso de las residencias, etc, para evitar que se resbalen de la silla, sillón, etc, se necesitaría casi una persona al cuidado por cada enfermo. Es obvio que a la mayoría nos parece injusto y a veces innecesario, NADIE quiere que se nos caiga el familiar y al personal de residencias, centros de día, hospitales, si de verdad ama lo que hace (que hay de todo…por desgracia) tampoco, pero es un tema que hay personalizarlo para cada caso, y… se pueden evitar al 100%? Pues no lo sé, pero sería perfecto.
Un saludo