«Es un milagro que esté viva»
- Vecinos y familiares celebran el hallazgo en una acequia de Gamarra de la anciana de 86 años que desapareció durante cuatro días
11 del 6 de 2012
La familia de María Encarnación González de Lopidana, de 86 años y enferma de Alzheimer de tipo moderado, no fue la única que suspiró de alivio el sábado, cuando supo que la mujer que había desaparecido durante cuatro días había sido encontrada viva. También los vecinos del pueblo de Gamarra celebraron el feliz desenlace tras unos primeros momentos de estupor protagonizados por una voz de alerta y la repentina llegada de policías y ambulancias. Todo fue posible gracias a uno de los habitantes de la entidad local, convertido en improvisado héroe por pura casualidad.
Se trata de Manuel Díaz de Heredia, natural de Gamarra, donde vive y trabaja en las tierras de la familia desde hace años. Poco podía imaginar que su paseo el sábado por la tarde para coger «unas cerezas de una de nuestras fincas» desentrañaría una desaparición que durante esta semana ha mantenido en vilo a Vitoria. En el camino de vuelta, ya con los frutos en la mano, algo le llamó la atención y al acercarse se encontró con el cuerpo de una mujer.
Era María Encarnación -aunque en esos momentos él aún lo desconocía- y se hallaba tendida «boca abajo» en una acequia de un terreno donde la familia Díaz de Heredia siembra trigo, patatas y alubias. Se trata de una finca a la que se accede por un pequeño camino ubicado detrás de la Escuela de Hostelería de Gamarra. «La mujer tuvo que entrar desde el pueblo para llegar al camino, luego fue andando por él y no sé por qué motivo, se desvió y se cayó a la acequia, si no, podría haber seguido recto por el caminito, que acaba cerca de Abetxuko», explicó ayer a EL CORREO el padre de Manuel, Jesús. Tras la caída, la anciana quedó atrapada y fue incapaz de levantarse de una zanja donde las altas hierbas y el terreno inestable dificultan sobremanera el equilibrio, máxime para alguien de edad avanzada que además desconoce la zona.
Dudas
«Al menos el sitio donde cayó estaba limpio, porque estamos con el regadío de la zona y hay otros lugares cercanos más enfangados», detalló Jesús, quien duda de que la mujer llevara mucho tiempo en el canal ya que un día antes -el viernes- «yo estuve por allí para cortar el riego y no vi nada».
Nada más descubrirla, Manuel alertó a la Policía, que rápidamente desplazó varias patrullas hasta el lugar. Allí los agentes comprobaron que la anciana seguía con vida e inmediatamente la identificaron como María Encarnación, la mujer buscada durante días por un amplio dispositivo. Tras avisar a los sanitarios, éstos fueron capaces darle los primeros auxilios antes de trasladarla al hospital Santiago.«Fue una alegría saber que estaba viva, es un milagro, porque al principio, cuando vimos las patrullas y ambulancias, pensamos que la habían encontrado muerta», explicaba con obvia satisfacción otra residente de Gamarra. «Fíjate que otra vecina comentaba que suele pasear con el perro por allí y que era una pena que no hubiera encontrado nada, pero es que ni por el pueblo la vimos. Y eso que había carteles y que el jueves dijeron que la habían visto por aquí cerca», relató. «Lo importante es que se encuentra bien», añadió Jesús.
El mismo sentimiento lo compartían ayer los familiares de María Encarnación, que aún no terminaban de creerse que estuviera de nuevo entre ellos. Tras agradecer la colaboración prestada en la búsqueda reconocían que cuatro días de angustia e incertidumbre les habían dejado «agotados», aunque el mejor premio que obtuvieron fue cuando, al llegar el sábado por la noche al hospital Santiago para ver a su madre-donde aún permanece ingresada-, ésta reconoció a sus cinco hijos. Un instante de pura emoción que se prolongó ayer con los reconfortantes mensajes médicos. «Le están haciendo diferentes pruebas y los resultados son positivos. Los médicos quieren ver ahora si sufrió una embolia o qué pudo pasar», comentaba una de sus hijas tras apuntar como buen síntoma que su madre había desayunado «bien».
«He estado en casa»
Los primeros análisis devuelven poco a poco la tranquilidad a la familia de María Encarnación, que ahora deberá recuperarse de los días que permaneció fuera de su domicilio aunque, al ser preguntada, ella relató a sus allegados que estos días los había pasado «en casa». Los sanitarios que la rescataron de la acequia encontraron a la mujer «con las uñas dañadas», al parecer por arañar la tierra cuando trataba de incorporarse, y los ojos «ligeramente inflamados» por frotarse con las manos manchadas. Además, presentaba la piel de las piernas bastante irritada por el sol.
Pero estas marcas no dan pista alguna de cómo ha sobrevivido a lo largo de esta semana en que Policía Local, Ertzaintza y Cruz Roja habían rastreado diversos puntos de la ciudad. Los propios parientes y amigos de la mujer recorrieron la calle Madrid, el Casco Viejo o San Martín, puntos en los que pensaron podía encontrarse por vivir allí parte de su familia, para luego ampliar la búsqueda por toda la ciudad.
B. CORRAL / M. REGO | VITORIA.
Imagen | http://www.noticiasdealava.com/
Fuente Noticia | http://www.elcorreo.com/alava/v/20120611/alava/milagro-este-viva-20120611.html
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