Poema Alzheimer
Sebastián es ex-cuidador o cuidador, porque los que hemos tenido el placer, el dolor y honor de cuidar en casa a un familiar sabemos que eso es para toda la vida.. Podremos olvidar, desconectar, recomenzar, intentar desapegarnos de lo que hasta ahora fue un trágico «modus vivendis» pero estarán con nosotros SIEMPRE.
Él ha querido compartir con Alzheimer Universal éste poema y nosotros con mucho placer os lo hacemos llegar. Os gustará y os veréis reflejados como tantas veces, en tantas cosas que a veces os dará la impresión de que somos calcos, con distintos matices pero con muchísimas similitudes. El autor también ha querido compartir unas palabras que os transcribo a continuación
Cuidador Alzheimer 2007-
Hace ya 4 años (2011) en que mi mamá política falleció por culpa de esta maldita enfermedad. Los años precedentes fueron algo terrible para toda la familia, en muchos momentos la enfermedad nos llegaba a superar y no veíamos sino una oscuridad total. Al dolor de perder a un ser querido se une el desamparo, el abandono y la desidia por parte de unas instituciones públicas que miran hacia otro lado y no ven la realidad (al menos en nuestro caso así fue) las penurias económicas que tuvimos que sufrir toda la familia, ya que en este aspecto no recibimos ayuda alguna.
Con el paso del tiempo en vez de olvidar los recuerdos se refuerzan, se alzan como colosos imposibles de contener y tienen que salir por donde sea. Creo que este es mi caso y esta historia que quiero compartir con todos vosotros no creo que sea única, seguro que hay muchos casos iguales o similares, y volcando todas mis vivencias he publicado un libro (EL VIAJE) dedicado a Evangelina Sánchez, (mi mamá) a todos los enfermos de esta terrible enfermedad y a sus familias. A continuación os pongo una poesía en la cual creo que se resume todo el dolor que sentía cuando la cuidaba un día tras otro.
Cada día un recuerdo menos y una lágrima más.
Un recuerdo menos
Una lágrima más,
Mientras de la oscuridad
Como una maldición
Nace la locura,
Con los ojos fijos
En un infinito perdido,
En una memoria yerta
Falta de recuerdos,
Y la vida continúa
O acaso se entretiene
Con juegos macabros
Y sueños rotos.
¿Porqué te fuiste madre
Donde lo negro anida?
Con el amor que olvidaste
En alguna parte,
Mi desconsuelo es verte
Y no poder retenerte
Junto a mi lado
Pues no quiero perderte.
Al amor y a los besos
Que ayer me diste
Y que hoy olvidaste
Te mando y te remito,
Más, ni me oyes
Ni me entiendes
Y percibo el dolor
Que supone el perderte.
Cada día, cada instante
Un recuerdo menos
Una lágrima más,
Un dolor lacerante,
No es tu culpa, lo sé,
Ni es la culpa de nadie,
Y sin embargo hay veces
Que me siento culpable.
Quiero que vuelvas madre
De esa oscuridad
Que te envuelve y atrapa,
Que te mata y me mata,
Que como una maldición
Estúpida y macabra
Borra los recuerdos
Y en silencio te apaga.
Al ver como mueres
Mi corazón se desgarra
Por el amor que fue
Y olvidó la mañana,
Maldita enfermedad siniestra
Que como una maldición
A ti te atrapa y a mí me rompe
Con su dolor lacerante,
Vuelve conmigo madre
Que no quiero perderte
Por este olvido negro
Que es peor que la muerte,
Y cada día un recuerdo menos
Y una lágrima más.
En tus ojos madre
No brilla ya el amor,
Solo el miedo más cerviz
La más completa locura,
Solo el silencio eterno
Que trae el olvido.
Sebastian Calero Escribano
El Viaje. Editorial Letra Clara.
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ISBN: 978-84-94371-44-8
GÉNERO: Narrativa
ENCUADERNACIÓN: Tapa blanda con solapas
TAMAÑO: 15 x 21 cm.
PÁGINAS: 120
rafty dice
Que hermoso poema. Yo también tuve la dicha y bendición de cuidar a mi papa. Y es verdad como esta maldita enfermedad nos los arrebata de poco a poco y para nosotros como hijos es horrible ver como merman dia a dia.