Recuerdos
En esta vida los recuerdos son como ladrillos que crean depósitos en tu mente, van pasando los años y los vas colocando uno a uno, cada experiencia, los momentos vividos en las diferentes épocas de una existencia, los albergas en tu mente y corazón.
Se van sumando en tu memoria y son, lo que muchas veces marcan nuestra vida, y al cabo de un tiempo vas a rememorar, algunas veces con una sonrisa, otras con una lágrima..pero recuerdas…y vuelves a sentir. Ese es el milagro del cerebro.
¿Qué sucede con el enfermo de Alzheimer? ¿los recuerdos se borran del todo? ¿el cerebro será capaz de eliminarlos? o son..de alguna forma «encapsulados»?
En cualquier caso deberíamos conservar la esperanza y luchar por encontrar la forma de reactivarlos.
Cuando el olvido empieza a exteriorizarse, los recuerdos se difuminan y es como si la mente empezara una travesía hacia lo infinito…un viaje dentro de uno mismo.
Duele cuestionarse lo siguiente si una persona no recuerda casi nada o nada, ¿en qué crees que piensan?. ¿cómo puedes ir por el tiempo sin recordar?, ¿cómo se siente una persona que no recuerda?
Aquel primer beso de la persona de la cual te enamoraste, la fecha del nacimiento de tus hijos, los rostros de las personas que amas, tus amigos, ¿dónde queda todo esto?
Es una sensación de haber vivido en soledad, y esta te envuelve, terminas encerrado en un cuerpo vacío…sientes miedo de lo que te rodea, te quedas con los trozos de un existir, con el eco de unos pasos, y una mirada perdida a un pasado y el presente, el día a día que conforme van pasando la neblina del olvido se vuelve más densa y los envuelve…
Ahora imagina esto: un día despiertas y abres tus ojos, (ponte en su lugar) te incorporas en tu cama y no sabes dónde estás, quién eres o qué día es. Te sorprendería lo que pasa por la mente en esos instantes, la confusión y el miedo se apoderan de ti, no hay nada conocido a tu alrededor, y la puerta de la habitación se abre, y viene alguien te saluda y tú no sabes quién es…de pronto, te sumerges dentro de un pozo oscuro donde habita el temor, la impotencia el desconcierto, se traduce en una pérdida de esperanza, asumir que debes depender de alguien mas para que te guíe, y en algunos casos sentir que eres una carga para los demás.
No posees nada que te sostenga, intentas buscar respuestas y no las hay, divagas en un mundo que no conoces, interpretar las palabras se hace tan difícil, la vida pasa a ser una vieja película en blanco y negro, que en algún momento se podrá volver muda.
Esto acarrea perder todo sentimiento de dignidad; y en muchísimos casos, un deseo profundo de no sobrevivir , un pensamiento de muerte se hace dueño de tu mente.
Sin embargo, si cuentas con una voz que te guíe a través de la tormenta, unos brazos que te levanten cuando las fuerzas fallan y un amor que te sostenga, el camino no se torna tan oscuro, ni tan frío…existen días que cuesta hasta respirar, pero sientes esa fuerza que no sabes de dónde vienen pero que te ayuda a continuar..
Cualquier enfermedad es debilitante tanto física como emocionalmente, pero una que se lleve tu memoria y tus recuerdos, es lo mas triste que te puede acontecer, porque al final eso somos … Recuerdos, ¿No?.
Magdalena López Quiroz dice
Injusto..
Vivir toda una vida, para terminar sin recordarla.
Maria dice
Me duele el alma de solo imaginarlo , pobrecito mi amor en que laberinto te haz de sentir.