Entrevista al Corazón del Cerebro: El Hipocampo
Encuentro con el corazón del cerebro
G: Muchísimas gracias por concederme esta entrevista Sr. Hipocampus, porque para mí es una de las estructuras más importantes del cerebro de mi madre. Para empezar, dígame en qué zona de cerebro vive?
H: Primeramente quiero agradecerle su interés por mí y le respondo. Estoy situado en la zona del sistema límbico y por lo tanto estoy muy relacionado con los procesos mentales que están relacionados con la memoria y con todo lo que tiene que ver con las emociones.
G: Quién le puso este nombre? ¿Quién fue su padrino de bautismo?
H: Mi padrino fue un amigo de mi gran familia llamado Giulio Cesare Aranzio y sabe por qué me puso Hipocampus?
G: No, lo desconozco totalmente…cuéntemelo
H: Pues me lo puso porque dijo que me parecía a un “caballito de mar” por mi forma alargada y curvada.
G: Ud. se encuentra situado en…
H: Estoy en la parte interior del Lóbulo Temporal y exactamente estoy situado entre el Hipotálamo hasta la Amígdala.
G: Y me imagino que no estará solo, no?
H: No, estoy asociado con una parte de la Corteza Cerebral, conocida como Arquicorteza, que es una de las regiones más ancestrales del encéfalo humano.
G: Bien, ahora me interesa saber para que me ayude a comprender la enfermedad de mi madre ¿Cuál es su función más importante?
H: Es complicado explicarle mi función, pero lo voy a intentar. Mi función principal es de “mediador”.
G: Mediador? Explíquese por favor…
H: Sí, verá hago función de mediador en la generación y en la recuperación de los recuerdos.
G: Es decir, a ver si lo he entendido bien. Su papel es de suma importancia en la vida de mi madre.
H: Por supuesto, yo tengo un papel esencial en la consolidación de los aprendizajes realizados por su madre, porque por un lado, permito que ciertas informaciones que ella tiene, hago que pasen a la memoria a largo plazo y por el otro, vinculo este tipo de contenidos con ciertos valores positivos o negativos, es decir, depende de si los recuerdos de su madre están asociados a experiencias agradables o tristes, o dolorosas tanto fisiológica como psicológicamente. Para ser más exacto, son los procesos mentales ligados a la emoción lo que determina si su madre los ha almacenado como recuerdos positivos o negativos.
G: Sí, por ahí quiero seguir. ¿Se podría pensar que Ud es la parte del cerebro en la que se almacenan los recuerdos a largo plazo de mi madre?
H: Sí y no…le explico: La realidad es mucho más compleja que esta simple idea. Como le he dicho anteriormente, yo actúo como mediador de recuerdos, cuya aparición y desaparición está asociada a la activación y desactivación de redes neuronales distribuidas por muchas zonas del encéfalo.
G: Muy complicado es todo esto….
H: Si, a ver si se lo puedo explicar de otro forma para que lo entienda: Yo no contengo recuerdos, pero actúo como “un interruptor” de activación que permito que se activen distintos recuerdos distribuidos por diferentes partes del encéfalo y además , yo estoy más relacionado con unos tipos de memoria que con otros.
G: Qué interesante!! Explíquese por favor.
H: Yo tengo un papel esencial en la Memoria Declarativa, es decir, en los contenidos que pueden ser expresados verbalmente, sin embargo, en la Memoria No Declarativa, que es la que interviene en la memorización de los patrones de movimientos y las destrezas motoras que tiene cada persona como por ejemplo, bailar, andar en bicicleta, etc. está más controlada por otras estructuras como son los Ganglios Basales y el Cerebelo.
G: ¡Qué compleja es toda su familia!
H: Jajaja, si estoy de acuerdo con Ud. Permítame un ejemplo: Cuando una persona “me tiene muy dañado” puede seguir aprendiendo destrezas manuales, pero NO recordaría haber aprendido anteriormente este proceso.
G: Se dice que Ud. interviene en la forma en que percibimos el espacio, es decir, la manera en que guardamos en la mente un espacio tridimensional a través del cual nos movemos.
H: Efectivamente, así es, porque yo tengo un tipo de neuronas llamadas “Células de lugar”.
G: Pues por lo que me ha explicado en esta entrevista, mi madre le tiene a Ud. bastante dañado porque ya ha perdido la capacidad para retener nuevos recuerdos e incluso para recordar informaciones de su vida pasada e incluso de la más reciente, pero de momento, tengo que darle las gracias porque todavía no le “ha robado” las de su primera infancia y confío en que ella, pueda ir independizándose o desapegándose de Ud. para evitar que se haga dueño absoluto de su cerebro.
Contésteme una cosa, ¿ A Ud. el tema de nuestro tipo de alimentación le afecta?
H: Por supuesto, una dieta no saludable me afecta porque yo tengo una función muy importante en el metabolismo energético y colaboro en el mantenimiento de la vida celular y en la protección de las neuronas, por eso les pido un favor ¡Coman Sano! Porque si no, yo no voy a poder proteger a sus neuronas.
G: Y para ir finalizando esta entrevista, un tema que quizás no está demasiado estudiado: los efectos de la meditación en nuestro cerebro, por supuesto, sin relacionarlo con ninguna religión. Según he leído, un equipo de psiquiatras ha realizado el primer estudio que documenta cómo ejercitar la meditación puede tener efectos beneficiosos en nuestro cerebro. Las conclusiones revelan que esta práctica puede provocar cambios considerables en las regiones cerebrales relacionadas con nuestra memoria. Para esta conclusión tomaron resonancias magnéticas de la estructura cerebral realizadas a un grupo de personas con un pre y un post y las conclusiones reflejaron que hay beneficios a nivel cognitivo y psicológico.
¿Qué me puede aportar sobre estas conclusiones, le afectan a Ud?
H: Efectivamente, con la práctica de la meditación unos minutos al día, se produce un incremento de la densidad de materia gris, estructura implicada en el aprendizaje y la memoria y en estructuras asociadas a la autoconciencia, la compasión y la introspección.
G: Muchísimas gracias por dedicarme unos minutos de su tiempo y seguramente habrá millones de personas que estarán muy agradecidas por haber aportado un poquito de luz a esta incomprensible enfermedad y dejo abierta una pregunta que quizás me pueda contestar en otra entrevista: ¿Por qué se dedica a almacenar recuerdos en la vida de las personas para luego robárselos poco a poco?
H: Interesante pregunta y yo le respondo con… ¡Todo pasa por y para algo!
(Cerramos micrófonos)
Sr. Hipocampo, ahora que hemos finalizado la entrevista y a micrófono cerrado quiero decirle algo:
Voy a ponerle una DENUNCIA para acusarle de:
Ser responsable absoluto de impedir la comunicación entre las neuronas de mi madre.
Por robarle los recuerdos de toda una vida y sobre todo de algo que es de una crueldad supina: Que impida que mi madre no reconozca a su marido, mi padre que con tanto amor la cuida, no reconozca a sus hijas y nos confunda con sus hermanas, no recuerde el nombre de su única nieta.
Le ACUSO y DENUNCIO por:
Hacer revivir a mi madre recuerdos dolorosos e incluso por el sufrimiento que le causa cuando busca a su madre y al no encontrarla, ella piensa que la ha abandonado.
Mi madre tiene 85 años de experiencia de vida, de aprendizajes realizados y ahora a veces cree que tiene 15, 12 o 10 años donde no existimos nadie de la familia que ella ha formado y de la que tan orgullosa se ha sentido.
Le acuso y denuncio por ser una estructura que ella ha tratado con mucho mimo y cuidado, comiendo sano, no bebiendo y no fumando, pero quizás a Ud lo que no le ha gustado, es todo lo que ella ha trabajado para que a su familia no nos faltara de nada y quizás por eso, ahora la está castigando.
Le denuncio en nombre de millones de familias por su crueldad en el trato a las personas enfermas y por el enorme sufrimiento que causa a los que ¡Nos ha tocado conocer su lado oscuro!.
Le acuso por ser único responsable de que mi madre vaya desaprendiendo lo aprendido y vaya dejando su mente cada mes, cada día, cada hora como una “tábula rasa” donde sólo existe oscuridad y vacío.
Y para finalizar mi denuncia le digo:
Podrá robar sus recuerdos,
y no lo podré impedir,
pero no podrá robar su corazón
porque ese lo tengo yo…
y no se lo pienso dar.
Todos los derechos reservados:
GLORIA MARTIN DIEZ
Col GZ 00772
Psicoterapeuta Familiar Sistémica
Psicoterapia Gestalt
Mediadora Familiar
Responsable del Área de Envejecimiento del COP (Gipuzkoa)
Vocal del Consejo General de la Psicología del Área de Envejecimiento
crishernando dice
Me ha encantado este post!!! Es lo más original que he visto nunca en psicología. Soy psicóloga y jamás se me habría ocurrido plantearlo así. Creo que hace mucho más comprensible el papel del hipocampo. Y la parte final de denuncia, es totalmente inesperada! Me encanta!!!! Te deseo muchos más posts como este. Te sigo!