At the age of eight, Marcel is abandoned by his mother. He is raised by his grandfather Pascual who drives him into a world of fantasy and gives him the love and care that his mother couldn’t. Years later, when Marcel turns twenty-one, he thinks that the time to live by his own is arrived. He’s got plans with his girl friend and wants to leave his home. But at that time Pascual has turned old and starts showing the symptoms of a disease that will affect Marcel’s plans dramatically. He is sick of Alzheimer. Marcel will have to postpone his plans in order to take care of his grandfather… the only real relative he ever had. Marcel and his grandfather get on well again, and are very close now. The tenderness they feel for each other emerges again. Marcel and Pascual see each other for the last time. Marcel finds a old letter of his mom with an address in Berlin. Marcel sad, angry and totally lost and confused, leaves Spain and travels to Berlin looking for his mother. There he will live unexpected experience and strong emotions.
ENTREVISTA A FREDDY MAS FRANQUEZA (Director):
¿Cúal fue la idea inicial que te impulsó a llevar a cabo esta película?
La angustia y el vacío que dejó la muerte del primer ser querido, mi abuelo. Me encontraba en Berlín estudiando cine y la soledad que sentí no tenía respuesta. Era más bien un dolor que quemaba. La falta de discurso y palabras para llegar a comprender me hizo empezar a escribir un pequeño relato. La suerte fue que les interesara a Hans- Joachim Schlegel, Jutta Brückner y Wim Wenders, mis tutores, que me dieron la confianza suficiente y trabajaron conmigo para darle forma y terminar siendo un proyecto de largometraje.
¿Elegiste centrarte en la relación entre un nieto y un abuelo?¿Por qué?
Porque mi abuelo sembró en mi ese universo personal que me hizo descubrir las emociones que dan sentido a lo que hoy soy y a lo que siento. Desde los valores que me transmitió, es desde donde me acerco hoy al día a día..Creo que muchas personas pueden llegar a sentir lo mismo y mi forma de compartirlo con ellas es esta película. Mi infancia fue esa tienda en la que trabaja el abuelo protagonista de la película, esos recuerdos de días felices con un nuevo amigo después del sentimiento de abandono…esa muerte que me abrió una herida incurable.
¿Qué te hizo elegir a un niño sin ninguna experiencia ante la cámara? ¿Y cómo te ganaste su confianza?
Sergio Padilla ha sido todo un descubrimiento. Su mirada es muy profunda y es capaz de reflejar esa soledad inconsolable me hizo conectar con mi infancia. Creo que ni a través de mis recuerdos o sueños he sentido esa conexión con tanta intensidad. Mirando sus ojos, de forma extraña y mágica, veía la emoción que quería transmitir en la primera parte de la película. Pensé que si la cámara era capaz de captar lo mismo, entonces podría ser honesto con lo que sería el arranque del personaje de Marcel que es determinante para crear la base emocional de la película puesto que toda gira en torno a él.
Su confianza llegó de la misma forma que la de Héctor Alterio, Alberto Ferreiro y Mónica López. Tras unos momentos iniciales de tanteo y distancia incómoda que se creó cuando me intenté aproximar al mundo íntimo de estas personas para las que era un completo desconocido y viceversa, creamos espacios sensibles comunes de forma totalmente inconsciente e intuitiva. A partir de esos espacios intenté moldear la adaptación de la persona al personaje y dejar puentes para que se alimentasen el uno del otro.
¿Cuál fue tu intención al elegir este tipo de imagen y sonido para la película?
Era imprescindible que la imagen tuviera verdad y poesía, pero también sinceridad. Esa verdad la fabricó el director de fotografía Carles Gusi, potenciando la sencillez y la naturalidad. Queríamos que predominara una estética próxima al neorrealismo. La poesía la aportaron los movimientos y las repeticiones de posiciones de cámara, que fueron planificados para que generasen una cierta rima en la narración. El momento que Marcel es abandonado por su madre, es idéntico a la imagen en que Marcel encuentra su casa vacía doce años después. He intentado crear esa repetición narrativa y visual a lo largo de la película para dar la sensación de que la vida es como el agua que cae de las nubes y finalmente vuelve a ellas. Respecto al sonido he querido que el silencio sea protagonista del espectro sonoro de la película. Los sentimientos de los personajes los he vivido desde el silencio, pero también desde la incorporación sutil de contrastes y contrapuntos musicales. Creo que la atmósfera sonora generada es la que hace que se transmita la intensidad emocional entre las relaciones de los personajes.
¿Porqué te interesan los planos de larga duración?
Necesito sentir como evolucionan los matices de las emociones dentro de la misma imagen. Es de ese modo como llegan en la propia vida y como más intensamente me llegan también desde el cine. Si he podido transmitir la esencia de un momento decisivo en la vida de Pascual, Marcel o su madre, sin utilizar una nueva posición de cámara, sino trabajando exhaustivamente la puesta en escena y los movimientos de cámara, he apostado por ello porque para mi así se respira mejor el tiempo y la acción tiene la presión correcta.
¿Cómo fue que elegiste a Héctor Alterio y Alberto Ferreiro como actores principales?
Hector Alterio es contraste y profundidad y Alberto Ferreiro es mirada, esa mirada de soledad inconsolable que también tiene Sergio Padilla, el niño. Además, creo que son dos apuestas absolutamente seguras. Héctor, con sus más de cine películas, ya forma parte de la historia del cine español, en un lugar de máximo prestigio. Y Alberto creo que es uno de los actores jóvenes con un futuro más prometedor.
Creo que tiene una técnica extraordinaria y una naturalidad y contención en sus personajes que le van a llevar muy, muy lejos. Para mi ha sido un lujo poder contar con ellos.
¿Amanecer de qué sueño?
Eso depende del espectador, creo que en el final de la película está la cerradura y cada espectador tiene la llave. Cada uno va a sentir una emoción particular y va a necesitar expresarla cuando termine la película ante sí mismo o ante los demás. A partir de esa reflexión creo que cada espectador contestará a esta pregunta.
¿Qué te ha aportado esta primera película como director?
He vivido y compartido momentos irrepetibles y durísimos que ya han cambiado mi concepción de mi mismo. He llegado a comprender que el cine es la vida hecha poesía por todo aquello que se puede llegar a extraer de él si se tiene la paciencia y la posibilidad de aprender haciendo más películas. Además, la posibilidad de participar en la máxima competición de un gran festival internacional como el de Moscú, con mi primera película, me parece un sueño.
ENTREVISTA A HÉCTOR ALTERIO (Actor Principal):
¿Qué le hizo participar en esta película?
La manera en la que el director quiere contar la historia. Pacual es un personaje atractivo, muy estático pero con muchos matices emocionales. Es un personaje de esos que suponen un reto para un actor porque se expresa más hacia el interior que hacia el exterior. Un personaje que tiene que comunicar una tormenta de sentimientos, pero que no puede expresarse abiertamente. Como he dicho, un reto difícil de rechazar.
Por otro lado, hacer la película de un director novel es un incentivo para mi trabajo porque siento que le estoy a portando al cine un elemento que si llega a andar con buen pie enriquecerá a la industria.
¿Está satisfecho con la interpretación de su personaje Pascual?
A mi me encanta. En estos momentos estoy viviendo una especie de luna de miel con una nieta que acaba de nacer y en cierta manera me siento identificado con el abuelo de la película, que de repente pasa a tener una responsabilidad nueva, que no se esperaba. Con esa circunstancia, rodar se ha convertido en una especie de investigación, una búsqueda emocional que me hace revivir algo muy mío, algo que llevo muy dentro.
¿A qué presta más atención en el momento de interpretar una secuencia?
Hay un trabajo previo de discusiones y ensayos donde aparecen cosas que personalmente no te sientes cómodo interpretándolas. Creo que eso se transmite y le llega al público y el momento de atajarlo es en el trabajo previo al rodaje. Pero siempre se escapan ciertos detalles que cuando se está rodando hay que poner abiertamente sobre la mesa y decidir. Creo que si yo no me veo creíble muy difícilmente el público me creerá y ahí murió la capacidad de conmover. Y eso, conmover, es la esencia y el objetivo de mi trabajo.
¿Qué encuentra de especial o de particular en Amanecer de un sueño?
Yo no podría, ni sería el más indicado para responderle, pero intuyo que haberme entretenido tanto rodándola, con esa investigación propia que le he comentado antes, es lo que le da a la película un valor diferencial. Creo que la historia te atrapa por dentro de un forma directa y sencilla, sin rodeos. Personajes que viven y sienten con gran intensidad, pero que son incapaces de transmitirlo a sus seres queridos… y eso sí lo tiene que ver el público. Trabajar este material es un riesgo, pero también un reto. Y creo que en este caso, un reto superado.
Descarga gratis la Banda Sonora Original (cortesia de terraalavista.com)
Ayúdanos a mejorar…Escribe aquí tu comentario!