Comunicación en el Alzheimer
Comunicarse de manera correcta con una persona que padece Alzheimer u otra demencia
La comunicación humana, la relación entre las personas se desarrolla simultáneamente a dos niveles:
• A nivel racional, para lo cual se utiliza las palabras como medio de transmisión de ideas (Lenguaje verbal).
• A nivel emocional cuando lo que se transmite son las emociones a través del lenguaje corporal como son los gestos, las posturas, las miradas, la expresión del rostro, el tono y volumen de voz… (Lenguaje no verbal).
Dicho en otras palabras, el lenguaje es la base de la comunicación entre las personas. Pero el lenguaje no son solamente las palabras que decimos, sino también cómo lo decimos, es el lenguaje no verbal y es una gran fuente de información porque es mucho más revelador de nuestros sentimientos y de nuestras intenciones que las palabras que pronunciamos.
Se debe tener en cuenta con los pacientes que sufren Alzheimer y otras demencias producidas por otros tipos de deterioro cognitivo el lenguaje sufre un paulatino deterioro y su habilidad para comunicarse disminuyen a medida que el deterioro atraviesa cada una de sus fases, además por la influencia de trastornos del comportamiento como la ansiedad, la apatía, la depresión, la desinhibición, las falsas identificaciones e ilusiones, y las ideas delirantes.
Esto afecta los vínculos sociales y, sobre todo, los familiares del enfermo, volviendo fundamental para su entorno contar con una serie de pautas para poder mejorar la comunicación con la persona enferma.
Consejos para comunicarse con un enfermo.
– Acércate, preséntate y di quién eres. Es posible que no te reconozca.
– Escoge palabras sencillas, frases cortas y utiliza un tono de voz amable y tranquilo.
– Evita hablarle a la persona que sufre de Alzheimer como si fuera un bebé o hablar de él o ella como si no estuviera presente.
– Reduce las distracciones y el ruido, como la televisión o la radio, para ayudarle a la persona a concentrarse en lo que le estás diciendo.
– Mira a la persona a los ojos y llámala por su nombre, asegurando que tiene tu atención antes de hablarle.
– Permítale suficiente tiempo para responder, tenga cuidado de no interrumpirle.
– Si la persona con Alzheimer está luchando por encontrar una palabra o comunicar un pensamiento, trata amablemente de proporcionarle la palabra que está buscando.
– Trata de presentar las preguntas e instrucciones de una manera positiva.
– Presta atención a las preocupaciones de la persona, aunque sea difícil entender
– Mantén la calma y ten paciencia, debes repetir el mensaje las veces que sea necesario y con el tono adecuado.
– Nunca hagas presión ante preguntas que impliquen recordar, es posible que no consiga responder.
– No grites, ni te enfades si no logras comunicarte.
Paciencia..
Ten SIEMPRE presente que a pesar de no poder hablar y comunicarse, los enfermos SIENTEN y están VIVOS.
ana maria dice
Muy buenos consejos , despues de leer este articulo me percato que cometo errores ,voy a corregir ,gracias
visitación Orta dice
hola, saludos , me viene muy bien toda información sobre el tema, mi padre, lleva dos años con la enfermedad, el diagnostico es cuerpos de Lewy , me gustaría mas información sobre las diferencias entre Alzheimer y la enfermedad de mi padre. Saludos
Adelina GImeno Navarro dice
Leo y leo, pero no consigo asimilar que mi padre se está apagando. Intentare llegar a cabo vuestros consejos, no es facil, pero por su bien y el mio tendré que actuar asi. Gracias un saludo desde Valencia.
DÓNDE ESTÁS
Es injusta, inaceptable, esta cruel enfermedad que se apodera de tus seres queridos. Los maltrata escondiendo aquello que fueron, los aparta de todo aquello que quisieron. Moral y físicamente los destroza, los humilla inmerecidamente, no son dueños de sus actos.
Y una se pregunta, qué dónde están. Ya no son quienes eran, no los reconoces, en el mejor de los casos, si lo hay, ríes. Pero el llanto y la frustración son la forma más cotidiana de vida.
Es lícito que les perdones sus actos, no son ellos, pero la rabia de no hallarlos cuando les hablas o simplemente cuando los ves con la mirada perdida llamándote como a su madre.
Rompe dentro de ti cualquier momento de paz y tranquilidad que destroza tu estabilidad. No están aquí, ni allí, son la conversión de sí mismos a su niñez. Adultos olvidados por su mente, que no saben comer, ni saben cuándo ni dónde aliviar sus necesidades.
En una palabra, o en varias, da igual, como lo plantees, son seres humanos que se trasforman en otros y se olvidan de vivir, a pesar de que su corazón late con fuerza y quieren, aunque no lo sepan decir. Y sufren y sufres, siendo más injusto para ellos que para ti, por el momento.
Es la enajenación mental que te atrapa, que te esconde en ella, no dejándote ver, es la apisonadora de la vida, llamada Alzheimer.
“Escrito desde la impotencia y la desesperación”
Adelina GN
Jesús Tortosa Oliden dice
Hola Adelina, aunque desgarradora pero real, nos gustó tanto que lo publicamos. Gracias!