Estaré para ti
Realmente podemos entender lo que encierran estas palabras, cuando salen de nuestro corazón hacia alguien que está en el sendero de cuidar o atraviesa una enfermedad que le oscurece el horizonte.
Son sólo tres palabras que se vuelven extraordinarias, cuando las sientes en medio del miedo, la incertidumbre, la inquietud, y la preocupación de un diagnostico que llega sin avisar y rompe todo lo estructurado de una vida.
En el momento que le dices a alguien “estaré para ti”, es el deseo de acompañar desde tu corazón en cualquier circunstancia y momento, es poder tener la confianza que permanecerás a su lado, aun cuando en medio de la enfermedad su familia y/o amigos le/la «abandonan.»
Sin manual de instrucciones
Una enfermedad como esta viene sin manual, te reorganiza la vida a diario, no hay un plan seguro, debes improvisar y hacer magia para sobrevivir, es así que debes discernir, cuando te obsequian estas palabras, sabrás con seguridad que te acompañaran a través de este reto, inclusive cuando el mundo se desmorone y todo se vuelva oscuro.
En ese instante que escuchamos un “estaré para ti”, ya seas tú el enfermo o el cuidador, estas palabras te harán recordar lo especial que eres para alguien más.
En algún momento de la enfermedad, de pronto se aloja una sensación de dolor y tristez; es cuando el cansancio llega a hasta nuestra mente y alma, es justo en ese momento en donde la persona se encierra en su soledad y se retira del mundo que le rodea, las fuerzas ceden y la determinación para cumplir con las expectativas de los demás se agota, y la fortaleza que tenías para levantar a los demás se va, no queda ni para ti mismo y salvarte de hundirte en un vacío desconocido…
Y de pronto
…un estaré para ti… viene a ser el puente entre dos mundos, el real y el de la enfermedad y acorta la brecha entre ellos, y cruza el muro que nos separa de la vida, es esa persona que tu alma reconoce y sabes que estará allí para ti, cuidándote, brindándote la seguridad y la compañía que necesitas, respetando tu espacio, pero sabes que será tu ancla en la tormenta, caminara a tu lado mientras los otros guardarán la distancia durante el viaje que tienes por delante. Un largo y duro viaje.
En medio de una tormenta de emociones y sentimientos, será quien nos mantenga enfocados entre quiénes éramos y en que nos estamos convirtiendo, quien te renovará el ánimo, quien estará contigo en el momento que vives y te proporcionará el consuelo, la paz, la compresión en estas circunstancias que se salen del contexto, y donde lo no dicho se vuelve elocuente.
Nuevos retos
La enfermedad viene día a día con nuevos retos y no sabes lo que sucede y nunca puedes saber lo que el mañana traerá. Cuando se experimentan la enfermedad, el dolor y el sufrimiento, sin embargo, necesitamos la presencia de otro para escucharnos a nosotros mismos, en voz alta, describir y explicar nuestras circunstancias para que podamos dar sentido a nuestra realidad.
La enfermedad no te da tiempo. Es desordenada. Es complicada. Es cambiante. Nos altera el rumbo. En estas situaciones, no necesitamos respuestas, necesitamos alguien que nos escuche.
Elegir estar para alguien es la mejor prueba de cuidado y amor. La simpleza de tener la voluntad de responder a la necesidad de otro, y estar allí te hará diferente a la mayoría de los demás.
La presencia es un recurso escaso y valioso en la vida moderna que debe ser visto como acto de valentía.
La disposición a entrar en la vida de otra cuando la mayoría de los demás se van, sí, eso es valentía personificada.
Un estaré para ti… palabras llenas de magia, amor, entrega e incondicionalidad.
Magdalena López Quiroz dice
Estaré Para Ti…es un acto de amor…
Nadie mejor que un cuidador sabe el significado de estas tres palabras.
Alzheimer Universal dice
Importante el apoyo para encontrar parte de la «paz» y desechar algunos miedos