Sin test mágicos: pruebas que pueden indicar un mayor riesgo de alzhéimer.
Cada vez que surgen noticias sobre una prueba que puede decir de forma rápida, no invasiva y fiable si una persona tiene o tendrá la enfermedad de Alzheimer, nuestra web se llena de visitas de personas que desean conocer dónde, cómo y hasta cuánto cuesta la tan deseada prueba. Sin embargo, la realidad es que actualmente esa prueba no existe. Se puede saber que una persona tiene alzhéimer cuando ya los síntomas iniciales dan las primeras señales de alarma. Técnicas como el PET cerebral, la punción lumbar y la resonancia magnética son de gran ayuda. Pero eso es cuando ya hay síntomas ¿Cómo saber que vamos a padecer la enfermedad?
No, no existe una prueba rápida, como si fuera una bola mágica y nos diga si padeceremos alzhéimer. Lo que sí hay son investigaciones que han encontrado una relación entre diferentes enfermedades e indicadores biológicos y un riesgo incrementado de padecer la enfermedad. Recientemente encontramos un artículo que llamó nuestra atención. Fue escrito por el doctor en Ciencias de la Salud William Cole, y en él habla de diferentes pruebas que pueden indicar si nuestro riesgo de padecer alzhéimer es más elevado que el de otras personas.
Análisis de glucosa en plasma en ayunas y examen A1c
Las noticias sobre el efecto de la diabetes en el cerebro se suceden un día sí y otro también. Mientras más altos sean nuestros niveles de azúcar en sangre y mayor la resistencia a la insulina, mayor también será la degeneración en el hipocampo, una zona del cerebro directamente vinculada a la memoria. El análisis de glucosa en plasma en ayunas y el examen A1c ayuda a determinar si padecemos diabetes o estamos en una fase pre-diabética.
Análisis de homocisteína plasmática total.
Un meta análisis reciente sobre los factores de riesgo de padecer la enfermedad de Alzheimer encontró evidencia suficiente para considerar la hiperhomocisteinemia, el aumento en el plasma de la concentración de homocisteína, como un factor de riesgo de padecer la enfermedad de Alzheimer. La homocisteína es un aminoácido que se libera cuando el cuerpo digiere ácido fólico y otras vitaminas del grupo B. Se considera un indicador de riesgo elevado de padecer accidentes cerebrovasculares. Y precisamente la salud cardiovascular tiene una estrecha relación con la salud cognitiva.
Pruebas inmunológicas.
En los últimos años la ciencia ha acumulado evidencias del papel del sistema inmunológico en la evolución de la enfermedad de Alzheimer. La acción indiscriminada de las células del sistema inmunitario, que llega a dañar células sanas, se está viendo como una de las causas del deterioro cerebral en el alzhéimer. Incluso, en las personas sin esta enfermedad, la reacción inflamatoria crónica del sistema inmunológico puede estar provocando deterioro del funcionamiento mental. Mediante el análisis de muestras de sangre se pueden ver los niveles de proteína C-reactiva (PCR), producida por el hígado. El nivel de PCR se eleva cuando hay inflamación en todo el cuerpo. Además, una prueba más específica, como la que se realiza para saber los niveles de citoquina (también mediante el análisis de muestras de sangre) puede dar información más precisa.
Estas pruebas no van a decir de forma segura si vas a padecer alzhéimer, pero sí te ayudarán a saber cómo es tu nivel de riesgo en comparación con otras personas que no presenten alteraciones en los indicadores que antes mencionamos.
En realidad, son datos que todos deberíamos tener sobre nuestro organismo, fundamentalmente porque hay mucho que hacer desde la prevención y el cambio de estilos de vida para mejorar nuestra salud.
Ayúdanos a mejorar…Escribe aquí tu comentario!