Atención y Cuidados de Enfermería en Alzheimer

Atención y Cuidados de Enfermería en Alzheimer

Atención y Cuidados de Enfermería en Alzheimer

Debido al impacto que ocasiona la enfermedad de Alzheimer en la vida diaria del enfermo, la labor del cuidador es clave para tratar a los pacientes con esta enfermedad.

A medida que el diagnóstico progresa  los enfermos empeoran y se vuelven cada vez más dependientes, haciéndose necesaria la continua adaptación para la resolución de problemas a los que el cuidador se puede ir viendo abocado.

A continuación veremos en este artículo algunas recomendaciones de como el cuidador puede abordar estos problemas y tratarlos.

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Plan de actuación del cuidador de Alzheimer

Como ya hemos dicho antes, la labor del cuidador es fundamental para la atención y tratamiento de los pacientes con enfermedad de Alzheimer, otras demencias o enfermos postrados que requieran de cuidados especiales.

Entre los contenidos que el cuidador deberá abordar, y que veremos en este artículo, nos encontramos con las siguientes situaciones:

  • Cambios en los procesos mentales relacionados con la pérdida de memoria, confusión y desorientación asociados con la demencia.
  • Deterioro de la comunicación verbal relacionada con el avance de la enfermedad.
  • Alto riesgo de caídas/traumatismos debido al desconocimiento o falta de prevención en cuanto a los peligros ambientales.
  • Correlación entre la incontinencia y la pérdida de memoria que conlleva la demencia.
  • Cambios en los patrones de la realización de las necesidades fisiológicas del enfermo.
  • Cambios en los patrones del sueño asociados con irritabilidad y desorientación.
  • Déficits de autocuidados del enfermo relacionados con el deterioro del control motor y pérdida de memoria.
  • Crisis familiares provocadas por estos procesos adaptativos durante la enfermedad.
  • El aislamiento social tanto de pacientes y familiares como de los cuidadores.
  • Ansiedad relacionada con los cambios o amenazas reales o percibidos.

La enfermedad de Alzheimer es una enfermedad que comienza a afectar a la persona muy lentamente, dificultando la realización de las actividades diarias.

A medida que la enfermedad progresa, esta enfermedad eventualmente conducirá a una dependencia absoluta de los pacientes. En este sentido, en base a la complejidad de esta patología y a los contenidos anteriormente mencionados, a continuación os presentamos algunas recomendaciones para el cuidador en la atención de pacientes con enfermedad de Alzheimer.

Cambios en los procesos mentales relacionados con la pérdida de memoria, confusión y desorientación asociados con la demencia.

Objetivo de atención: evaluar y determinar las nuevas capacidades del enfermo

Actuación del Cuidador:

  1. Proporcionar a los pacientes un entorno constante y rutinario que les sea familiar para ayudarlos a desarrollar sus capacidades limitadas.
  2. Evitar cambiar de lugar a la hora de las actividades rutinarias para evitar la frustración causada por no poder recordar.
  3. Permitir y vigilar a los pacientes cuando desarrollan conductas habituales como la deambulación, siempre que sea en un entorno seguro.
  4. Evaluar  los signos y síntomas de depresión del paciente.
  5. Para evitar la inquietud e irritabilidad del enfermo, el cuidador deberá mantener un entorno adecuado y establecer una rutina sencilla para los pacientes: se pueden hacer álbumes de fotos para recordar el pasado, fomentar las actividades deportivas y la arteterapia.
  6. Colocar etiquetas de nombre en objetos y habitaciones para ayudar al enfermo a reconocer sus nombres y funciones.
  7. Cuando sea necesario el cuidador puede dar pistas sobre la identidad del objeto y la tarea.
  8. Colocar un reloj grande y un calendario en su habitación y marcar los últimos días con una «X» para ayudar al enfermo a ubicarse en la fecha correcta.
  9. Hacer una lista de las actividades diarias.

Deterioro de la comunicación verbal relacionada con el avance de la enfermedad

Objetivos de atención: establecer una comunicación verbal y no verbal de la manera más eficaz posible y comprender sus necesidades a medida que aumenta la demencia y se deterioran las habilidades lingüísticas.

Actuación del Cuidador:

  1. Trata a los pacientes de manera abierta, amigable y relajada.
  2. Habla con el paciente con voz clara y profunda.
  3. Identifícate siempre y mira directamente al paciente.
  4. Proporciona un entorno relajado y alentador evitando ruidos e interferencias.
  5. Evalúa comportamientos no verbales, expresiones faciales, lenguaje corporal, posturas, gestos, etc …
  6. Explica la actividad en frases cortas. Al dar instrucciones, asegúrate de dividir la tarea en unidades pequeñas y fáciles de entender. Si es posible, usa gestos simples, señala objetos o emplea demostraciones.
  7. Asegúrate de llamar su atención.
  8. Escucha la voz del paciente e involúcralo en la conversación.
  9. Identifica las conductas habituales, la realización de determinadas conductas para pedir algo y anotar sus significados para comprender mejor al paciente.
  10. Anima a los pacientes a que cuenten historias o situaciones pasadas.

Alto riesgo de lesiones debido a la falta de prevención de los peligros ambientales

Objetivo asistencial: garantizar la seguridad de los pacientes, ya que los pacientes han perdido la capacidad de controlar factores ambientales potencialmente peligrosos.

Actuación del Cuidador

  1. Guía al paciente para que reconozca su entorno.
  2. Por seguridad y evitar caídas, cuando lo creas ya necesario, coloca las barandillas en la cama.
  3. Mantén el entorno libre de obstáculos y asegúrate de que haya suficiente luz para evitar tropiezos o caídas debido a la oscuridad.
  4. Evita el uso de calentadores, estufas, etc que puedan ser peligrosos.
  5. Utiliza para el enfermo zapatos con suela antideslizante.
  6. Vigila al paciente en busca de signos de dolor.
  7. Procura un ambiente tranquilo sin grandes cambios.

La incontinencia está relacionada con los fallos de memoria provocados por la demencia

Objetivo asistencial: reducir el número de episodios de incontinencia y facilitar la realización normal de sus necesidades fisiológicas.

Actuación del Cuidador:

  1. Muestra la ubicación del inodoro, si lo necesita, utiliza el dibujo del inodoro para identificar la puerta y ayudarle así a encontrarlo.
  2. Lleva un control de los hábitos fisiológicos e intenta que vaya al baño a la misma hora todos los días para mantener una frecuencia.
  3. Aprende a reconocer los indicadores no verbales que evalúan la necesidad de ir al baño del paciente.
  4. Comprueba que la higiene es la correcta.

Cambios en los patrones de la realización de las necesidades fisiológicas del enfermo.

Objetivos asistenciales: evaluar la presencia de síntomas de incontinencia aguda y realizar un plan de recuperación y normalización si es necesario.

Actuación del Cuidador:

  1. Evalúa al paciente en busca de causas de incontinencia aguda, como infección, retención o delirio.
  2. Asegúrate de que el paciente reconoce el lugar donde está el cuarto de baño. Coloca un dibujo con la imagen del inodoro en la puerta y, si es necesario, acompáñalo y supervísalo.
  3. Evalúa en todo momento si hay señales no verbales que indiquen la necesidad de  ir al baño.
  4. Limita la ingesta de líquidos por la noche.
  5. Verifica la correcta utilización de los pañales o cualquier otra protección que el paciente necesite.
  6. Evalúa el tipo de incontinencia y prevé cualquier tipo de infección.
  7. Procura mantener una regularidad en la realización de sus necesidades fisiológicas.

Cambios en los patrones de sueño asociados con irritabilidad y desorientación

Objetivos asistenciales: reducir los trastornos del sueño.

Actuación del Cuidador:

  1. Mantén al enfermo activo durante todo el día, intercalando periodos de descanso cuántas veces sea necesario.
  2. Para evitar que los pacientes se duerman durante el día, realiza caminatas cortas y actividades planificadas.
  3. Los pacientes que tienden a dormirse durante el día deben intentar estar sentados cómodamente pero no acostados.
  4. Proporciona un ambiente tranquilo, sin ruidos por la noche y sin luces fuertes.
  5. Adminístrale algún sedante si es necesario y siempre según las indicaciones de su médico.
  6. Establece una hora para acostarse y levantarse y asegúrate de seguirla.
  7. Enseña a tu paciente o familiar cómo realizar técnicas de relajación.

Déficits de autocuidados del enfermo relacionados con el deterioro del control motor y la pérdida de memoria.

Objetivos de atención: ayudar a los pacientes a completar las tareas de autocuidado.

Actuación del Cuidador:

  1. Valorar la imposibilidad de vestirse, comer, bañarse, etc …
  2. Valorar el estado físico y cognitivo del paciente.
  3. Enseñar a los familiares y demás cuidadores a cuidar.
  4. Cuidar a los pacientes que son completamente dependientes y ayudar a los que no son completamente dependientes.
  5. Brindar instrucciones paso a paso para que los pacientes puedan realizar el máximo número de tareas por su cuenta.
  6. En el baño, utiliza taburetes en la ducha para favorecer el cuidado personal.
  7. Para que el paciente se vista y se desvista, se recomienda llevar calzado sin cordones, ropa holgada o cómoda, cinturillas con velcro o elásticos, y evitar el uso de botones y broches.
  8. Disponle la ropa en el orden en que debe usarla y ayuda al paciente a vestirse.
  9. Ayuda también al paciente durante las comidas, déjalo comer solo si puede, proporciónale pajitas, vasos especiales y tazas grandes con asas fáciles de usar.
  10. Mantenlo siempre hidratado y asegúrate de la ingesta de fibra en su dieta.

Crisis familiares provocadas por estos procesos adaptativos durante la enfermedad.

Objetivos asistenciales: reducir los conflictos familiares y apoyar a los cuidadores.

Actuación del Cuidador:

  1. Animar a los familiares y demás cuidadores a expresar sus sentimientos, frustraciones y problemas.
  2. Brindar apoyo, comprensión y sensación de seguridad a los familiares.
  3. Derivar a los familiares a los servicios sociales de su comunidad para solicitar ayudas como la atención domiciliaria.
  4. Animar a los familiares y cuidadores a utilizar los servicios de centros de día u otros centros asistenciales si fuera lo más conveniente.
  5. Aconsejar a familiares o amigos que interpreten el comportamiento del enfermo como reflejo del proceso patológico.
  6. Se recomienda que los cuidadores sigan manteniendo, dentro de lo posible, sus amistades y que participen en actividades sociales.
  7. Así mismo, se recomienda que los familiares participen en grupos de autoayuda, así como la asistencia a las Asociaciones de Familiares de Enfermos de Alzheimer si las hubiera en tu localidad o localidades cercanas.
  8. También es importante mantenerse informados, tanto familiares como cuidadores, en temas relacionados con la enfermedad a través de las redes sociales o cualquier otro medio al alcance.

El aislamiento social tanto de los  familiares como de los cuidadores

Objetivo asistencial: evitar el aislamiento social entre los pacientes y sus familias.

Actuación del Cuidador:

  1. Valorar la capacidad comunicativa del paciente y el grado de aislamiento social de los familiares.
  2. Animar a los familiares y amigos para brindar apoyo real al cuidador y evitar así el temido síndrome del cuidador quemado o burnout.
  3. Determinar un sistema alternativo de apoyo a la familia para que el cuidador pueda mantener una vida social.
  4. Acudir a talleres o terapias de apoyo en las asociaciones de familiares de la localidad.

Ansiedad relacionada con cambios o amenazas reales o percibidos

Objetivo asistencial: los pacientes reducirán la ansiedad y ganarán calidad de vida.

Actuación del Cuidador:

  1. Dar tiempo a los pacientes para que expresen sus miedos y respetar sus opiniones.
  2. Ayuda a reducir la ansiedad estableciendo una comunicación fluida, evita los interrogatorios y proporcione un ambiente calmado con pocos cambios.
  3. Durante la estadía en el hospital, acércale objetos familiares que reconozca con facilidad. Esto reducirá su estrés.
  4. Ayúdale a ubicarse continuamente, tanto en el espacio como en el tiempo.
  5. Evita excesos y limita el tiempo de visita de otros familiares.
  6. Reduce siempre que sea posible los estímulos estresantes, como ruidos excesivos, volumen alto de la televisión y luces estridentes.
  7. Anticípate a cambios de comportamiento derivados de los cambios horarios o estacionales.
  8. Emplea la terapia con música de su época para distraer al enfermo y cambiar su estado de ánimo si se encuentra agitado.

Toñi G. Cuevas

Fuente

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