«Inclinación al recelo y la sospecha»
«Es la condición o la propiedad de aquel/aquello que resulta suspicaz (adjetivo que refiere a quien es desconfiado o tiende a tener sospechas)»
«Suspicaz es quien tiene fuerte tendencia a sospechar o a ver alusiones ocultas bajo las palabras actos de otros y muy propenso a albergar desconfianzas hacia los demás».
La Suspicacia en el Enfermo de Alzheimer
ANGEL MORENO TOLEDO*
El enfermo de Alzheimer en ocasiones puede sospechar de los que le rodean, acusar a miembros de la familia o a otras personas de robo, ideas de castigo o punitivas, de infidelidad en comportamientos y juicios inadecuados.
Hay personas que encuentran dichos comentarios o falsas acusaciones como hirientes, debemos tener en cuenta que se deben a la enfermedad, son consecuencia del deterioro progresivo de la enfermedad de Alzheimer.
La gerencia de este tipo de manifestaciones requiere experiencia y templanza, así como un sólido conocimiento de las características y curso de la enfermedad.
Suelen ser fuente habitual de estrés, frustración, estas conductas desafiantes desatan la angustia en el cuidador.
Esta suspicacia como resultado de los delirios o falsas creencias, son un síntoma de la enfermedad.
Algunos de los ejemplos comunes de estos comportamientos son las acusaciones de que «alguien está envenenando su comida» o «robándole su dinero» o derivados de falsa identificación como «mi esposa/o es un impostor».
¿Cuándo ocurren estas sospechas infundadas?
Ocurren especialmente durante la etapa moderada de la enfermedad. A medida que el deterioro progresa, aparecen los déficits congnitivos (alteración progresiva de la memoria), la pérdida de atención y la desorientación, los episodios psicóticos (alucinaciones y delusiones).
Ocurren con mayor intensidad las conductas perturbadoras.
¿Cómo actuar ante estas situaciones?
* En primer lugar no se ofenda, entienda que es consecuencia de la enfermedad y trate de concebir la queja o la acusación, deje que el enfermo se exprese.
No trate de rebatir ni de contradecir a la persona, no trate de convencerla de su equivocación.
* Hable en tono suave, con voz cálida.
* Permitir una respuesta simple, tranquilizadora y haga sentir al enfermo que le importa, que es escuchado.
* Cambiar de pensamiento con una tarea agradable, cambiar el foco de atención a una actividad o que le asista en la finalización de una tarea.
* Si le acusa de la pérdida de un objeto o artículo específico, intente reponerlo lo antes posible.
“Le has echado algo a la comida, Quieres envenenarme”
Los trastornos de conducta pueden aparecer en el momento de la alimentación.
Muestre una conducta flexible, no caiga en estados de frustración ni irritación.
Plantear rutinas y cocinar lo habitual así como procurar una actitud paciente y alabe las conductas positivas.
Si es posible valore en qué medida el enfermo puede participar en la elaboración de la comida o incluso comer de su plato, probar la comida son medidas eficaces para confrontar las ideas de perjuicio.
[Tweet «Suspicare: Observar cosas por debajo de una realidad dada o cosas supuestamente ocultas.»]
Algunas medidas al respecto
* Consulte con el médico estas manifestaciones, sus observaciones del enfermo, el tratamiento farmacológico y las dosis.
* Puede explicar a la familia y a otros miembros que estas acusaciones sospechosas son causadas por la enfermedad.
* Adaptar el entorno para controlar aquellas fuentes estimulares que puedan alimentar el delirio (televisión, radio, alto volumen, ruido externo..).
* Si lo que «desaparece» es el dinero, deje que conserve algunas monedas en un monedero o en el bolsillo para aliviar o impedir el desarrollo de estas acusaciones.
* Si persiste la acusación de la «pérdida del objeto», conozca e indague acerca de los lugares / escondites donde el enfermo podría dejar dichos objetos o por donde deambular.
Imágenes: alo.com, consumer.
Ángel Moreno Toledo es autor de “El cuidado del enfermo de Alzheimer: Formación y consejos al cuidador”. 2014. ISBN 978-84-616-9089-3. Es psicólogo y colabora desde hace tiempo con este blog.
+ INFO https://www.facebook.com/cuidadodelenfermodealzheimer
Alberto dice
Afortunadamente jamás tuve dificultades de este tipo derante todo el periodo del desarrollo del Alzheimer con mi madre; confió en mí como toda la vida lo hicimos uno en otro.
Eduardo dice
Buenas tardes, mi madre sufre de esta enfermedad, que se agravo más tras el fallecimiento de mi padre, pero comenzó de esa manera y la tuvo de punto a mi hermana, pobre sufrió bastante hoy en día esta en un hogar, gracias por publicar las características